En estos días el cuerpo me pide escribir sobre lo que está sucediendo en Grecia. Pero como probablemente lo haga dentro de unos días, cuando el tiempo nos haya dado un poco de perspectiva, hoy me gustaría contar una pequeña anécdota que creo resume perfectamente algunos de los males de la sociedad actual (y que no está tan alejado de la problemática griega).
Dentro de las pocas medidas concretas que ha propuesto el PP en su cacareado programa electoral 2011, está la de la privatización de las televisiones autonómicas, que por cierto, con la legislación actual y hasta donde tengo entendido es ilegal. Pero bueno, ese ya sabemos que no es un obstáculo para los populares.
A raíz de esto, hace un par de días escuchaba un debate en la radio sobre la conveniencia de privatizar Telemadrid. Para quien no lo sepa, la Televisión pública madrileña tiene un déficit de más de 200 millones de euros, tiene una plantilla sobredimensionada si se compara con otras televisiones privadas y sus gastos de personal también son muy superiores a los de otras entidades similares del ámbito privado. Uno de los motivos es la duplicación de redacciones debido al marcado carácter político de sus órganos de gestión.
Aunque sin duda uno de los aspectos más conocidos de Telemadrid, es su particular línea editorial. Más cercana a las cadenas de ultraderecha de la TDT que a lo que debería ser una televisión pública, plural y democrática.
Por tanto, ante la "amenaza" de privatizar la cadena pública, mi primera reacción fue la de pensar que me importaba un pimiento....Al fin y al cabo caería en manos de un grupo afín a Esperanza Aguirre con lo que las cosas no iban a cambiar en absoluto y yo seguiría sin sintonizar dicha emisora.
GRAVE ERROR POR MI PARTE
Aunque las manipulaciones televisivas de Telemadrid han sido infinitas, quizá estas imágenes de Zapatero y Rubalcaba con el sello de ETA resuman perfectamente la línea de pensamiento de la cadena PÚBLICA madrileña
Me explico:
Instantes después de mi intuitiva e instintiva respuesta me di cuenta de que ingenuamente había caído durante esos instantes en su trampa. En esa trampa que nos tienden constantemente los que disfrazándose de corderos se dedican a devorar a dentelladas los bienes comunes.
Es la táctica habitual de los "privatizadores": primero ponen todos los medios a su alcance para debilitar, perjudicar y convertir en ruinosas las empresas y servicios públicos. Un ejemplo paradigmático es Telemadrid con su pésima gestión en los terrenos económico y editorial. Cuando se propone su privatización, muchos ciudadanos lo ven como la mejor manera de liberarse de semejante lastre. Y aceptan alegremente la misma.
La privatización supone en la práctica, la venta de un patrimonio común, a un precio ventajoso (al fin y al cabo ha quedado demostrado que lo que se vende no es rentable), claramente inferior a lo que han costado por ejemplo en este caso los edificios y equipamientos de la televisión pública. Y todo esto suele caer en manos de un empresario amigo del gobierno de turno, que en poco tiempo logra reflotar la ruinosa empresa pública, obteniendo enormes beneficios.
Y para cerrar el círculo, los políticos privatizadores cuando terminan su ciclo de "servicio público" (como ellos lo llaman), entran a formar parte de los Consejos de Administración de esas mismas empresas o de otras afines con generosísimos sueldos....Que se lo pregunten a Rodrigo Rato sin ir más lejos
El truco es sencillo, el engaño simple y los beneficios para unos pocos monumentales. No debemos dejarnos engañar. No debemos permirtir que nuestros representantes públicos asolen las propiedades públicas a cambio de unos puñados de monedas que rápidamente son devoradas por el actual sistema financiero.
Lo que debemos exigir a nuestros gobernantes es una política responsable de gestión de lo público, que permita que las empresas públicas sean rentables económica y humanamente, porque esa rentabilidad revierte por un lado en puestos de trabajo de mayor calidad y por otro, si se producen beneficios, éstos repercuten en la caja común.
Y eso es lo que los grandes capitales quieren evitar a toda costa. Por eso mucha gente poderosa está interesada en que lo público no funcione, y por desgracia para todos, lo están logrando.
PIÉNSALO: El 20-N son este tipo de cosas las que nos jugamos....
PORQUE CADA MORDISCO AL ESTADO DE BIENESTAR ES IRREVERSIBLE (y tus hijos el día de mañana te lo pueden echar en cara)
http://www.prnoticias.com/index.php/component/content/article/403-autonomicas/10067689-crisis-de-las-autonomicas-ii-la-deuda-de-telemadrid-supera-los-200-millones
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