Ayer comenzó una nueva reunión del G 20 en París, poco ha trascendido a la prensa sobre el transfondo de lo que allí está sucediendo. Pero las personas de a pie tenemos claras algunas cosas que raramente verbalizamos: Nada bueno puede salir de allí ni para nuestras economías cotidianas ni para las de los paises del tercer mundo.
Y es que este tipo de foros han demostrado sobradamente algunas cosas no por evidentes menos acalladas. Es decir, el objetivo de los dirigentes de esos 20 paises ricos es favorecer a sus propias compañías y empresas. Luego nos camelan diciéndonos que el beneficio de las corporaciones y multinacionales es nuestro beneficio; y se quedan tan anchos. Mientras, sube el paro, la inflación y se reducen los sueldos y los beneficios sociales, a la par que engordan y engordan los balances empresariales y los bonus de sus directivos. Y nosotros, pobres corderitos nos lo creemos.
Pero no acaban aquí las patrañas de este tipo de reuniones, tan bien adornadas por los medios de comunicación controlados por los principales beneficiados de las medidas que se adoptan en los mismos. Quizá la más falso es que con sus políticas pretendan reducir los abismos que separan a los paises pobres de los ricos en el planeta. Nada más alejado de la realidad. Por la sencilla razón de que en el mundo global en el que vivimos, el desarrollo de los paises ricos se produce a expensas de los pobres, y que mientras éstos sigan siendo pobres, sus recursos naturales podrán seguir siendo esquilmados a precios absurdos, para beneficio de los de siempre.
Aunque quizá, no todo sea tan mentira como acabo de comentar, porque tampoco las reuniones del G20 esconden mucho sus verdaderas intenciones, tan solo las disfrazan de lo que no son.... La principal prueba es que España ha sido felicitada por sus reformas por los demás miembros del G 20, y sinceramente no creo que ninguno de los representantes españoles en ese foro, ni sus familiares más cercanos, ni los miembros de los principales consejos de administración nacionales se hayan visto afectados por esas medidas tan elogiadas.
Todo esto tiene desde el punto de vista ideológico un par de derivas interesantes: Por un lado la reafirmación de que las únicas políticas posibles en el siglo XXI son las neoliberales, a pesar de que la realidad cotidiana nos indique que cada vez vamos a peor; por este motivo los partidos de la derecha europea se regocijan y se muestran altaneros y soberbios, manifestando constantemente que el tiempo les ha dado la razón. Aparentemente han vencido demostrando que el neoliberalismo es la única posibilidad sensata de presente y futuro, a pesar de que según he comentado en otras ocasiones, estén construyendo un gigante de pies de barro; Y por otro lado, un aspecto tremendamente frustrante, y es la capitulación de los partidos socialdemócratas ante las políticas neoliberales. Cuando están en la oposición nos explican las posibles alternativas; pero una vez en el poder, nos intentan convencer de que el único camino es entrar al redil y pasar por el aro. Como muestra un botón, el volantazo socialista en política de energía nuclear.
En fin, entre la torpe y miope convicción de la derecha europea de que han vencido ideológicamente; y la cobarde y desilusionante claudicación ideológica de los partidos de izquierda cuando llegan al poder, debería haber alguna alternativa. El camino no es fácil. Y las armas han de ser al menos del mismo calibre que las que emplea el enemigo (las grandes corporaciones multinacionales que manejan los hilos): No valen soluciones parciales, es decir nacionales, porque el enemigo tiene un carácter supranacional. El mínimo exigido habría de ser un movimiento de respuesta de ámbito europeo que pusiese en el centro de todo al ciudadano, expulsando de ese lugar a los beneficios empresariales; y que promoviese honesta y efectivamente políticas de desarrollo de los paises del tercer mundo para intentar resolver los graves e insostenibles desequilibrios actuales.
Todo lo que sea incidir en el actual camino neoliberal, serán pequeños pero constantes recortes del estado de bienestar. Y finalmente lograremos dejar a nuestros hijos un mundo muchísimo peor que el que hemos heredado de nuestros padres, eso si con unos magníficos balances empresariales. Quizá nos toque arrepentirnos durante nuestra jubilación (¿a qué edad?).
http://es.noticias.yahoo.com/12/20110218/tts-el-g20-abre-su-reunion-en-paris-para-c1b2fc3.html
http://www.abc.es/fotos-economia/20110219/reunion-paris-elogia-reformas-1401116406722.html
http://www.juantxo.org/2011/02/16/nucleares-historia-de-una-claudicacion/
http://www.faunanocturna.net/press/breve-historia-del-neo-liberalismo/
Leave a comment