Sin duda alguna el tema de conversación de la semana es el abandono masivo de los controladores aéreos de sus lugares de trabajo los días 3 y 4 de diciembre. Hay gente que lo ha llamado huelga....Y evidentemente no hay nada más lejos de una huelga que esta acción irresponsable e ilegal que decidieron secundar en un porcentaje significativo.
Mucho se ha escrito sobre este asunto, y mucho se escribirá, de hecho probablemente yo lo haga dentro de unos días cuando el ímpetu de la novedad se encuentre un poco más sosegado.
No sé si por fortuna o por desgracia el terremoto provocado por los controladores ha ocultado notablemente la más desafortunada de las intervenciones públicas del ex presidente José María Aznar. Y eso es mucho decir.
Pues bien, aprovechando la distancia que le otorga el Atlántico (circunstancia muy característica de su cobardía), el ínclito vallisoletano, además de su habitual y desagradable palabrería, ha venido a decir que el estado de bienestar es económica y financieramente inviable. No es nada nuevo en su discurso. Pero en esta ocasión lo ha ilustrado con una muy inquietante imagen: "no puede ser que la gente quiera empezar a trabajar lo más tarde posible y jubilarse lo antes posible". ¿Cómo que no?.
¿Dónde te has dejado la corona?
Es decir, que el modelo humano que defiende Aznar es el del sacrificio del individuo en beneficio de la empresa...No debemos asumir en ningún caso un sistema que nos empuje desde este tipo de planteamientos, porque sólo conducen a una cosa: La esclavitud. O sea, que según el bigotudo expresidente (o ¿era el presidente exbigotudo?, ya me lío), debemos renunciar a nuestros derechos sociales, como vacaciones, jubilaciones, Seguridad Social, etc por el único motivo de que son económicamente inviables. Casi que sería mejor prescindir de quienes hacen que este sistema no sea viable económicamente, y éstos son tan solo unos pocos: los mismos que se benefician de que el estado de bienestar no sea rentable, y que nos convencen de lo inevitable de este círculo vicioso.
Entre todos estos que yo considero prescindibles se encuentran:
1º. Los grandes magnates (Uy, casi tecleo mangantes) de las compañías multinacionales. Probablemente se pueden limitar a los consejos de administración de las principales compañías mundiales.
2º. Muchos de los que se sitúan en un escalón inferior, pero que están ansiosos por trepar al superior y así acceder a los inmensos beneficios del estado del "antibienestar".
3º: Todos sus altavoces. Como medios de comunicación o insensatos expresidentes.
En mesas como estas se deciden las horas que debemos trabajar y las contrapartidas que recibimos
Sin todas estas personas manejando los hilos de la actualidad las cosas mejorarían. Sugiero simplemente la eliminación de sus cargos, no la liquidación de los individuos.
En España, las palabras (por no decir otra cosa) de Aznar, tienen muchos adeptos. No lo entiendo. Esa resignación que manifiestan no es humana, porque asumen perfectamente que vamos a dejar un mundo peor a nuestros hijos que el que nos dejaron nuestros padres. O sea, que nuestros hijos trabajarán más por menos. De ese modo ¿en cuántas generaciones se legalizará de nuevo la esclavitud?.
¿Qué tipo de intereses pueden llevar a una persona a decir este tipo de majaderías?....
Yo quiero un mundo en el que las personas vivamos mejor, que necesitemos trabajar menos y dispongamos de más tiempo para realizarnos como humanos. No quiero tampoco insinuar que el trabajo no sea una forma de realizarse como persona, pero la inmensa mayoría de trabajos no son precisamente muy "realizadores". Aunque de nuevo, quien defiende opiniones contrarias a esta no es quien precisamente por ejemplo trabaja 8 horas en una cadena de montaje.
En fin, que debemos evitar la resignación, y si ya de entrada aceptamos los planteamientos que defiende Aznar, estamos definitivamente derrotados.
Creo que nuestros planteamientos vitales han de ser justamente los opuestos, aunque luego la realidad nos coloque a cada uno en nuestro sitio.
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