La publicación reciente del vídeo de la canción "Ratonera" de Amaral ha sido ampliamente comentada en diversos foros (https://www.youtube.com/watch?v=gqsYFLBJFZ8). Dicho vídeo supone una brutal crítica a nuestra clase política; quien no haya visto el vídeo, creo que debería hacerlo, y además se hará la misma pregunta que yo: ¿Para quién son los beneficios de la publicidad que se inserta antes de poder visualizarlo?. Aunque esta cuestión de los beneficios económicos de la indignación es otro problema sobre el que hoy no quería tratar.
Probablemente puedo estar de acuerdo con casi cualquier tipo de crítica que se haga a un elevado porcentaje de políticos. Pero vídeos como este en el que dicha crítica adquiere un carácter muy contundente; o artículos demagógicos de amplia difusión como algunos atribuidos a Arturo Pérez-Reverte coinciden en un problema grave: Confunden la consecuencia del problema que nos atañe con su causa.
Es decir, en mi opinión los males de nuestro país no se deben a que tengamos unos políticos nefastos (que los tenemos); pues simplemente tenemos los políticos que nos merecemos como sociedad. La causa de nuestros problemas es nuestro grave deterioro como individuos y como sociedad; la pésima clase política que padecemos es consecuencia (y no la causa) de ello.
Es más, este tipo de material crítico hacia la casta política acaba por convertirse en un peligroso arma en manos de nuestra clase dirigente. El mecanismo es obscenamente simple.
El mensaje transmitido es sencillo y fácilmente digerible por una inmensa mayoría de ciudadanos: Todos los políticos son igual de malos; y ellos son la causa de nuestros males. Esto genera automáticamente dos sentimientos. En primer lugar nos permite encontrar un chivo expiatorio de todos nuestros infortunios, lo cual fomenta un sentido de autocomplaciente inocencia en la generación de todos los problemas socio-políticos actuales; y en segundo lugar nos permite adoptar una postura acomodada de pasividad frente a dicha problemática pues de manera simultánea surge la terrible idea de que son todos iguales y yo me niego a participar. Actitud que sin duda alguna ayuda a perpetuar a los ineptos que nos gobiernan; aunque más inepto todavía es el que se cruza de brazos ante sus problemas y espera a que estos sean resueltos por un tercero mientras ve tranquilamente el partido de fútbol o la tele-basura.
Comodidad y autocomplacencia, posiblemente dos de los peores (si no los que más) defectos de nuestra sociedad. Ambos son fomentados cuando nos llegan mensajes como estos. Y en muchas ocasiones sospecho que no recibimos estos contenidos de manera casual, pues ellos son muy conscientes de que el principal aliado de sus privilegios es una sociedad acomodada y autocomplaciente. Fomentar ambos vicios no parece tan complicado.
En fin, que de todos modos la crítica hacia la situación actual es un arma imprescindible para resolver los problemas; pero no es suficiente. Quedarse en una crítica vacía de iniciativa ayuda a perpetuar los problemas. Cierto es que estos políticos no nos van a sacar de esta situación, ¿por qué iban a hacerlo si nadie se lo exige?. ¿Cómo es posible que tras sus lamentables gestiones, tanto PP como PSOE vuelvan a ser los partidos más votados?; ¿Cómo es posible que incluso con graves casos de corrupción, muchos políticos sean reiteradamente reelegidos?. El problema no son ellos; somos nosotros. Y no vale decir a modo de autocomplaciente pasividad: "yo no voto a ninguno". Los abstencionistas son tan cómplices de este sistema como los propios votantes íncondicionales.
Necesitamos participar, opinar, y mojarnos. Cada uno individualmente. Es la única manera de que las cosas empiecen a cambiar. Lo más sencillo es votar, lo que sea; pero votar. Porque participando con tu opinión estás ayudando a que las cosas cambien; mientras que no opinar solo sirve para dar carta blanca a los mismos perros con diferentes collares. También tenemos que pensar si podemos agregar nuestro grano de arena a que las cosas cambien, participando en alguna de las instituciones de representación que AÚN tenemos a nuestro alcance. La que sea: Partidos políticos, sindicatos, ONGs, movimientos vecinales......da igual.
Tan solo lograremos cambiar las cosas desde dentro. Casi todos lo estamos deseando; y los que no lo desean van a fomentar que no votes y que no participes.....
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